Una decoración fantástica con un colgante para plantas

A algunos, un colgante para plantas puede parecerles una reliquia de los años 70 y 80 del pasado siglo. Sin embargo, para los amantes de las plantas es un ornamento obligado. El amante de las plantas con problemas de espacio puede recurrir a esta opción para decorar su hogar de forma personalizada. La posibilidad de crear un espacio para la planta predilecta surge así sin limitación de presupuesto y sin restricciones a la propia creatividad. Y todo ello en pocos pasos.

El material:
 

• Un panel redondo de madera

• Dos cuerdas o cordeles largos y finos

• Opcionalmente, una borla

• Ganchos para fijación en la pared

• Grapadora manual, por ejemplo Novus J-13 y grapas de alambre fino A6 - 10 mm dependiendo del grosor de la cuerda o el cordel

Y así es como se hace:

1. En un primer paso hay que anudar entre sí los cuatro extremos de las dos cuerdas. Hay que verificar que las cuerdas tengan idéntica longitud.

2. Los nudos se hacen en el centro del panel de madera y las cuatro cuerdas se separan unas de otras en una especie de cruz uniforme. Así es como se crea la sección inferior del colgante. Las cuatro cuerdas se fijan respectivamente con la grapadora manual en el panel de madera para que se mantengan firmes sin deslizarse.

3. Ahora se atan las dos cuerdas entre sí manteniendo la longitud deseada o se fijan simplemente en el gancho y se orienta el panel de forma horizontal.

Consejo: A quien le guste el detalle, puede fijar la borla debajo del panel de madera para potenciar la imagen estética del colgante.

El colgante para plantas no requiere espacio para su colocación en suelo y es un elemento estético muy atractivo. Con un mínimo esfuerzo y un presupuesto pequeño pueden transformarse un viejo panel de madera y un par de cuerdas en un precioso elemento decorativo de imagen cautivadora. Un recurso ideal para configurar el espacio de un pequeño piso y dotarlo de un toque bello y personalizado.